Monthly Archives: May 2011

La Gaucha (y su querencia)

“Como é linda a liberdade
Sobre o lombo do cavalo
E ouvir o canto do galo
Anunciando a madrugada
Dormir na beira da estrada
Num sono largo e sereno
E ver que o mundo é pequeno
E que a vida não vale nada”

(estrofa de poema “Deixando o Pago” de João da Cunha Vargas)

Dejé atrás el pago,
la querencia, mi querencia.

“Um dia me deu saudades,
e eu fui rever meu pago”

“O que era chucro,
ficou manso”.

(“Querência”, João da Cunha Vargas)

Camino largo, kilómetros de espacio y tiempo.
Suena la milonga esta noche,
tocan los acordes del alma,
tiemblas las venas de nostalgias y sonrisas serias,
de gaucho mateando tempranito,
no come carne, pero matea, y cuánto.

Saudades, terra querida.
Minha terra de montanhas, gauchos, ranchos, liberdade das pampas.

Why not…?


– I like this expression.
– I don’t. It leaves everything either open to all, or to nothing. Too vague.

(Contáme de vos, no, vos contáme. No, dale, vos.)

Estampada la sonrisa de los rostros.
Segundos que duraron horas, más.
Eternos.
Tatuada e inocente expresión de felicidad,
evasión de cuestionarse el motivo,
simplemente risas por nada,
silencio, con atención, para sentir la melodía de las palabras.

– No prestás atención en mi.
– Si presto. Me di cuenta del huequito en la pera.

Faltaron las palabras, o sobraron.
En destino volvieron la realidad y la coherencia.

Adiós, maestro.

Suspiro de nostalgia de aquella vez que decidí mandarle una carta de agradecimiento por su apoyo a la juventud. En aquella época yo hacía parte de esa juventud, y sin sus palabras, maestro, el camino hubiera sido mas sinuoso aún.

Sin sus palabras, sin su sabiduría, la vida hubiera comenzado mas tarde. La conciencia hubiera demorado más en pedir permiso, el planeta estaría dando vueltas en cuadrados y yo ni enterada.

Gracias por todo y hasta siempre, maestro, Ernesto Sábato. Lo lloro, porque usted fue mi compañero de mesita de luz por muchos años, porque usted me calmó cuando me sentí perdida, por su coraje de admitir cambio y animarse a la vida.

Se fue otro héroe.